La natación, el peor enemigo de la ansiedad y depresión.
Como ya lo hemos comentado, la natación es un ejercicio que brinda muchos beneficios, es un asombroso ejercicio aeróbico, el sistema cardiorrespiratorio mejora y se mejora la recepción neuronal y cognitiva, por mencionar solo algunos. Pero ¿sabías que también combate la ansiedad y depresión? ¡Así es! No es solo un deporte que trae ventajas físicas, sino que también muestra resultados psicológicos positivos.
Verás, la natación es un deporte que nos exige mantener el control de nuestra respiración a la par de tener que hacer un esfuerzo físico. Esto da como resultado el aumento en la cantidad de sangre que se expulsa del corazón en cada latido, en otras palabras, existe una mayor eficiencia por parte de dicho órgano. También se liberan endorfinas, las encargadas de traer ese sentimiento de bienestar después del ejercicio al ser unos neurotransmisores que poseen una gran potencia analgésica.
Este deporte implica sumergirnos en el agua haciendo que nos concentremos en la respiración causando que nuestro sistema nervioso se relaje y reduciendo la sensación de estrés. Esto ayuda mucho, siendo que la respiración controlada, ayuda a regular la ansiedad. La natación cumple con ser un ejercicio de meditación altamente efectivo ya que aprendemos a nadar de forma relajada y suave, y el flotar ayuda a no crear tensión en los músculos.
Al ser un deporte que se hace en conjunto a otras personas, la natación mejora la socialización y la timidez, perdiendo los miedos y mejorando la interacción con los demás. Así mismo, es una excelente disciplina que aparte de acelerar el metabolismo, elimina esas sustancias que creamos en exceso durante el día, como la adrenalina y el cortisol, que están relacionadas con el estrés. Además, hace que incentivemos al sistema inmune para mantenernos sanos y también estimulamos zonas cerebrales encargadas del desarrollo pleno de todo ser humano.
Hay estudios que han descubierto que el volvernos activos después de ser sedentarios, puede reducir el riesgo de depresión hasta en un 30 por ciento, por lo que te invitamos a siempre buscar lo mejor para nuestra salud física y mental ya que ambas están estrechamente vinculadas. Es necesario que exista un balance entre dichos ámbitos para poder vivir en pleno bienestar.
